martes, 3 de enero de 2012

Una Lección del Método Feldenkrais 02: El Reloj Pélvico


El reloj pélvico. Lección del Método Feldenkrais


Elaboró en texto:
Mtro. Héctor Darío Aguirre Arvizu
Maestro graduado y certificado
en el Método Feldenkrais
Maestro en Antropología Física
Centro Feldenkrais del Sur

Enero 2012



1.  Acuéstate boca arriba. Comprueba cómo es el contacto de ti mismo con el piso. ¿Dónde apoyas mejor?, ¿dónde estás más cómodo(a)?, ¿dónde estás más suave?.

2.  Dobla las rodillas y apoya las plantas de los pies en el piso. Asegúrate que la cresta iliaca, la rodilla y el centro del pie forman una línea recta. La distancia entre los pies y las rodillas es la misma. Esta es la posición inicial.

3. Imagina que estás acostado sobre un reloj de manecillas de modo que tu cabeza apunta hacia las 12 y tus pies hacia las 6. De este modo el 3 está en tu lado izquierdo y el 9 a la derecha.

4. Rueda la pelvis llevándola desde la posición inicial de descanso o neutra a que presione el piso la parte de atrás de la cintura y regresa. Hazlo varias veces... Procura hacerlo lento y suave. Después de hacerlo cómodamente varias veces alarga el cuerpo y descansa.

5.  Vuelve a doblar rodillas y apoya las plantas de los pies. Ahora lleva la pelvis rodando a que presione el coxis y se levante la zona de la cintura. Varias veces del modo más cómodo posible. Repite con comodidad y fijándote cómo lo haces. Para y descansa un momento.

6.  Imagina que estás acostado con el reloj debajo de la cadera. Muévete como si presionaras hacia las 12 y luego hacia las 6. Esto es como apoyar primero la cintura y luego levantarla y apoyar el coxis. Hazlo varias veces. Que en ningún momento esté presenta molestia alguna. Observa qué hace tu cabeza. Para y descansa.

7. Lleva tus pies a la posición que estamos usando. Ahora apoya la cadera del lado izquierdo y levanta la del lado derecho. Esto es como llevar la pelvis a apoyar a las 3. Repita varias veces lo más lento y cómodo posible. No levantes demasiado el lado derecho, solo lo necesario para saber que lo levantas. Para y descansa.

8. Acomoda tus pies como estamos trabajando. Levanta la cadera del lado derecho y apoya el lado izquierdo. Esto es ir a las 9 en nuestro reloj imaginario. Repite con comodidad. Observa lo que haces con la cabeza. ¿Qué ocurre a lo largo de la espalda?

9. En la posición que estamos usando, lleva la cadera de las 3 a las 9. Varias veces. Piensa en rodar la cadera. Tu cadera es como un balón, redondo. Suave, cómodo y fácil. Todo el tiempo. Para y descansa.

10.   Imagina un pequeño reloj detrás de la cabeza. Dobla rodillas y apoya los pies. Rueda la cabeza para apoyar la oreja izquierda, hacia las 3. Muchas veces de modo cómodo. No cuentes el número de veces. Piensa en la redondez de la cabeza. Para y descansa.

11. En nuestra posición de trabajo ahora rueda la cabeza hacia las 9 varias veces. La oreja derecha se acerca al piso. No es necesario que toque. Para y descansa.

12. Ahora lleva la cabeza de las 3 a las 9 varias veces, pasando por el centro de modo muy suave. siente la redondez de la cabeza. Unas veces se acerca al piso una oreja y otras la otra oreja. Detén el movimiento y descansa alargando el cuerpo.

13.  Regresa y ahora mueve la cabeza para acercar la barbilla al pecho. Esto hace que se ruede la cabeza hacia las 6. Repita varias veces y descansa.

14. En este momento mueve la cabeza para alejar la barbilla del pecho y con eso vas a las 12 con la cabeza. Muchas veces. Ahora conecta... ve de las 6 a las 12 pasando por el centro del modo más cómodo posible. Varias veces y descansa.

15. En la posición de trabajo haz círculos alrededor del reloj. Con la cadera. Varias veces. Luego en sentido contrario. ¿Qué sentido elegiste primero, horario o antihorario? Para y descansa.

16. Repite lo anterior completando minuciosamente cada uno de los puntos del reloj, aunque sin tensiones particulares: 12, 1, 2, 3, 4…., 12. Y sigue en ese sentido horario. Junta las piernas y ve en qué se modifica el movimiento. Para y descansa.

17. Ahora en sentido contario, antihorario, procurando que el movimiento sea más continuo pero suave y lento, pasando por los puntos 12, 11, 10, 9,… 12. Y continuando. ¿Qué hace la cabeza? Varias veces y descansa.

18. En la posición que estamos usando, siguiendo la línea de las 12 a las 6, haz movimientos contrarios, opuestos, de modo que la cabeza se mueve en un sentido y la pelvis al contrario. Piensa para coordinarlos. Repite varias veces y para.

19.    Ahora haz movimientos contrarios a las 3 y las 9 entre la cadera y la cabeza.

20. Prueba ahora hacer círculos cadera y cabeza en el mismo sentido. Empieza despacio para que puedas coordinar de modo adecuado. Mantén la respiración fruida sobre todo ante cualquier frustración.

21. Prueba ahora movimientos en círculos puestos de cadera y pelvis. Piensa para coordinar de modo adecuado. Concéntrate en la coordinación.

22. Repite el movimiento de ambos, cadera y cabeza al mismo tiempo y en el mismo sentido, ¿qué cambió? Deja todo y descansa. Observa cómo es diferente el apoyo de tu cuerpo respecto al principio.

23. Párate rodando hacia un lado y observa cómo caminas. ¿Qué cambió?, ¿qué es mejor?

Disfruta tu nueva organización…

Mtro. Darío Aguirre